Fibromialgia y personalidad.
Fibromialgia y personalidad. Imagina que tienes dolores constantes en todo el cuerpo y por momentos aumentan en puntos específicos, cada vez se van haciendo crónicos, vas a especialistas, pero sólo te pueden dar medicamentos para controlar el dolor porque no hay cura, sin embargo, muchas personas minimizan lo que sientes o no te creen ¿Tú cómo te sentirías?…
No es una emoción agradable, cierto, pero lamentablemente muchas personas con Fibromialgia tienen que pasar por ello. Es una lucha constante con el dolor, los cambios en las emociones y falta de empatía del entorno, en ocasiones por el desconocimiento de la enfermedad.
¿Qué es la fibromialgia?
La fibromialgia es una enfermedad músculo-esquelética, que se caracteriza por el dolor crónico en todo el cuerpo y que aumenta en ciertos puntos, en lo que llaman puntos gatillo. Aunado a ello, se tiene dolor de cabeza, problemas para dormir, problemas gastrointestinales, fatiga, irritabilidad, ansiedad, depresión, etc.
Las personas que presentan fibromialgia tienen poca tolerancia al esfuerzo físico. Se sienten como si se les hubiera agotado la energía, con mucha fatiga.
La enfermedad no tiene cura, sin embargo, se controlan los síntomas, por ello se recomienda que las personas acudan con un reumatólogo para trabajar el dolor físico y con un psiquiatra para trabajar en las emociones que están relacionadas con la enfermedad, ya que afectan cómo enfrentamos dicho padecimiento, de hecho, la personalidad está muy relacionada en cómo vivimos el dolor.
¿Cómo se relaciona la fobromialgia y personalidad?
La manera en cómo concebimos el dolor, depende mucho de nuestra personalidad, hay personas que pueden ser más sensibles al dolor, a veces por las experiencias previas, las cuales les han hecho darle una mayor connotación negativa al dolor, lo cual genera, que nuestra manera de afrontarlo no sea la adecuada.
Lo que se ha visto es que la personas que padecen ansiedad y tienen rasgos obsesivos, son más propensos a vivir el dolor de una manera más intensa, esto sucede porque al sentir cierto dolor, comienzan a pensar constantemente en ello, aparecen los pensamientos catastróficos y al no saber cómo controlarlos, tenemos más dolor. Esto se va volviendo cíclico, ya que después el solo hecho de pensar en el dolor o tener un pequeño dolor, lo relacionamos con algo negativo y aparece a ansiedad.
A su vez estas emociones pueden detonar una depresión, ya que, si no sabemos cómo manejar el dolor, esto puede desencadenar lo que se llama indefensión aprendida, que es cuando no hacemos nada para detener lo que nos lastima, ya que asumimos que no hay solución, aunque esto no sea así.
Si tú tienes fibromialgia, no dudes en buscar ayuda, recuerda que lo que sientes es real y podemos trabajar para sentirnos mejor.
La Dra. Estephania Del Aguila Flores médico psiquiatra, psicoterapeuta egresada del Hospital Psiquiátrico Fray Bernardino Álvarez y la Universidad Nacional Autónoma de México, galardonada con el Premio Nacional de Excelencia 2017 y el Premio Nacional de la Mujer 2018. Apasionada de la difusión de información sobre la salud mental y emocional. Conductora del programa Salud Emocional TV y Salud Emocional Radio perteneciente a la Clínica Emocia.
Síguela en redes sociales como
La Psicóloga Brenda Trejo Rodríguez , es egresada de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Apasionada por la atención en psicología clínica, la información en salud mental y el conocimiento de los fenómenos psicológicos en niños y adolescentes.
Referencias:
Álvarez, M. (2003). Fisiopatología y terapéutica de la fibromialgia. Elsevier 22(1), pp. 86-96.
Becerra, J. & Robles, M. (2015). Subgrupos de pacientes con fibromialgia según el modelo de personalidad de Gray: estudio sobre características psicológicas. Revista colombiana, 22 (1), pp. 4-10.